Puro y duro Death Metal en la vena de los grandes es lo que Rigor Mortis nos presenta en su primer disco titulado “Antropofagia Existencial”.
Esta producción de hecho, fue producida por la banda y mezclado y masterizado por Sergio Vivar, grabado en Phonk Estudio, en Guayaquil.
Con una portada acorde al estilo y temática letrística elaborada por Josué Macías empezamos a recorrer cada uno de las canciones contenidas en la placa y el camino empieza con “Ceguera Cerebral” tiene aquella apertura que siempre nos gusta cuando tenemos un disco de de metal extremo: nada de concesiones, ni de guitarras acústicas; remates entrelazados con guitarras ásperas y dobles bombos que dan paso a una vocalización ultra gutural que juega con algunos agudos.
“Cancerígena desmembración” sigue la línea; excelente el trabajo de Andrés Sarmiento en los tarros, martillando sin piedad cada espacio; el bajo de Rodny Castillo (vocalista también) suena aplastante, tiene protagonismo; es un tema corto en relación al resto pero con una contundencia única, así como “Carnicería de Humanos” uno de los mejores cortes por las variantes rítmicas que contiene; paradas, remates, velocidad y nuevamente parada; ese tipo de musicalización me agrada sobremanera por que no hace el tema que vaya en una sola línea, la banda te sorprende cambiando súbitamente la potencia.
“Antropofagia Existencial” suena durísimo; quizás no existe el vértigo de sus predecesores, pero suena pesada; además, aquel sonido de la guitarra es su sello; suena saturada, diferente; limpia a veces y otras veces áspera.
Ya a estas alturas, se viene “Purulencia Anatómica” que nos devuelve a ese ritmo frenético lleno de destiempos; a veces la vocalización me transporta en ciertos pasajes al primer Morbid Angel, otro temazo, pura potencia al máximo.
Ciertas voces manifestaban que en el Puerto Principal difícilmente se podía hacer metal extremo; pero para muestra un botón: Rigor Mortis crea elabora sus temas cuidadosamente; suenan como una máquina aceitada y bien calibrada en todas sus líneas instrumentales; vocalmente brutalidad en estado puro; por ahí hubiera preferido una ráfaga de solos de Luís Burgos en las canciones; aunque percibo además que el vértigo musical y el espacio vocal no necesitan tal ingrediente. Asi que me sorprendieron de tal manera que ojalá continúen masacrando oídos con su estilo tan contundente.
Gracias a la banda nuevamente por el disco y si aún no lo tienen en sus manos, contáctense con la banda por que de verdad; es todo un tanque demoledor de Death Metal real.
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